Retomamos camino y volvemos a las andadas

           -Es hora de empezar a moverse- le dije a Pegaso que se hacía el remolón, se giró quedando patas arriba y dijo -desembucha, te relajas con unos largos y luego nos vamos-
Caballo sarcástico...! Tan poco tiempo a mi lado y cómo me conoce...
-No pasa nada, bueno, pasa lo de siempre por aquí, que no entiendo a la gente, no comprendo como, después de haber pasado las de Caín, no son capaces de ver más allá de eso..., siento haber ofendido a quién lo hice con aquella frase: -tienes problemas, vale, cuando yo vuelva de mis vacaciones en las Sheichelles ya, si eso, te llamo un domingo-, pero es que hoy es aplicable a tanta gente... que aquí a cada uno le duele lo suyo y es perfectamente lícito, pero no deis clases de vivir a los demás o, al menos a mí, porque es muy probable que haya vivido muchas más cosas que vosotr@s, que haya reído, llorado, escuchado,leído, bebido, fumado, follado, hecho el amor, despreciado, alagado y muchos participios más que tod@s vosotr@s juntos y, si no, haced memoria, intentad salir de vuestro propio barro e intentad recordar cuando todo brillaba con más o menos intensidad... ¿quién estaba allí con ustedes? YO, y cuando apagaban las luces y no quedaban bises? YO, y cuando se terminaban los kleenex  y el tabaco? Yo, y cuando Fernando quería cerrar? Yo, y cuando te ponían los cuernos o los ponías tú...YO TAMBIÉN. 
Porqué no os planteáis de una bendita vez dejar de joderme con tanta opinión, léase cátedra? porque ahora ya no dudáis, ya no me necesitáis para que os escuche, no, ahora simplemente venís con vuestra mega-visión de las cosas, de MIS COSAS, a pisarme las flores que estoy sembrando... daros cuenta de que para mí, aquel que no me entiende porque no se paró a pensarme y habló conmigo intentando escuchar y comprender... todos aquellos cuyos propios problemas son mucho más importantes que el hambre que asola el planeta, por supuesto mucho más que el Atolón de Mururoa y nada más lejos que mis problemas... estáis tan lejos de mi vida, que me parece absurdo continuar con relaciones de este tipo. ¡Pero si hay hasta quien le ha extrañado que escriba de los dioses griegos! tampoco de eso puedo escribir? os advierto... no soy Jose Antonio, soy Nuria Felicidad Domingo Velázquez, y no os voy a permitir que juguéis más con mi vida, portando la bandera de la inteligencia emocional (de la cual estáis muy lejos), de la amistad o de la fortaleza mal entendida. Ni mi inteligencia emocional, ni mi amistad, (léase cariño, añoranza), ni mi renovada fuerza puede ser entendida por quienes están tan preocupados por sí mismos. 
Y aquí sí que me mojo y me tiro de cabeza a la piscina (como cada lunes y miércoles, gracias por todo lo que estáis haciendo): tod@s aquell@s que os habéis hecho a vosotr@s mism@os, la estáis cagando en algo, yo retomaría el libro de instrucciones, porque molábais más como veníais de serie.

Agur ikaskide.-

Había pasado de Pegaso y parecía estar en trance, entonces dijo -Tía guitarra!- Yo me levanté y corrí sin poder dejar de reir hasta que el agua me rozaba los muslos, salté y nadé casi hasta la extenuación; cuando salí Pegaso me esperaba en pié, observándome , monté y comenzó un paso tranquilo, esta vez esperando su respiración a la mía. Colgué mi cámara al cuello dispuesta a reflejar todo lo que ocurra, con mi cámara nueva, desde mi punto de vista, así que el que no quiera salir en la foto... que tome nota del desconocido que borró mi teléfono y...CARRIL!

N.d A: Pegaso jamás me llamaría "tía guitarra a mí" en este caso lo dice por la persona que desencadena la vuelta a replantear de dónde mana la sangre con pus. Una vez ubicada tal persona, cortamos la hemorragia, desinfectamos la herida y la persona pasa a ser a partir de ahora "tal", sin mayúscula porque ni eso merece.